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REFLEXOLOGIA PODAL - Madrid

 

La reflexología podal es un método para activar el mecanismo de autocuración del cuerpo, mediante un masaje en las áreas reflejas de todo nuestro organismo en el pie. Los pies contienen puntos reflejos de los diversos órganos, glándulas y zonas anatómicas del ser humano, con los cuales están conectados por vía nerviosa.

El masaje en los pies es un arte milenario. A partir de antiguas ilustraciones y textos se sabe que ya fue practicado por los antiguos chinos, japoneses, indios y egipcios para proporcionar buena salud. Se puede considerar la reflexología podal como la forma intuitiva más antigua de autocuración. El hombre primitivo caminaba descalzo sobre terrenos accidentados estimulando así constantemente los reflejos de cada parte de su cuerpo situados en los pies y favoreciendo de esta manera el equilibrio del sistema circulatorio.

En nuestro tiempo, la reflexología podal es ampliamente conocida y practicada en muchos países del mundo no solamente como un tratamiento en si sino también como apoyo en diversos tratamientos médicos.

foto masaje reflexologia podal

foto masaje reflexologia podal

Algunos de los beneficios que se pueden conseguir a través de un tratamiento con reflexología podal son

  • reduce el estrés e induce a una relajación profunda liberando así tensiones físicas y psicológicas.
  • ayuda a segregar endorfinas, cambiando el estado anímico del receptor
  • mejora la circulación sanguínea
  • limpia el cuerpo de toxinas y sustancias químicas
  • ayuda a eliminar el exceso de grasas, azucares… producto de una alimentación inadecuada.
  • moviliza el potencial de autocuración del cuerpo, desbloqueando poco a poco el organismo y ayuda a regular el mal funcionamiento de algún órgano
  • actúa como medicina preventiva, liberando los bloqueos energéticos que con los años se pueden derivar en enfermedad.
Cuando un órgano de nuestro cuerpo no funciona bien, empieza a depositar pequeños cristales de ácido úrico y sales de calcio en los capilares sanguíneos de la zona refleja correspondiente en el pie, bloqueando de esta manera las terminaciones nerviosas de los pies y alterando en consecuencia la estimulación normal de este órgano.
Al estimular el pie con masaje y presión, los depósitos de acidó úrico y calcio se disuelven, son reabsorbidos por la corriente sanguínea y a continuación expulsados por el sistema urinario. De esta manera se devuelve al órgano afectado su estimulación normal y en consecuencia, la capacidad de recuperar sus funciones normales.

La duración normal de una sesión de reflexología podal es de 50 min. Es conveniente no recibir el masaje en plena digestión dejando un tiempo prudencial de al menos 2 horas entre la última comida y la recepción del masaje.